El abogado profesional de la Universidad se caracteriza por el alto nivel en sus competencias y saberes profesionales, por su vocación de servicio, por su trato fraterno, por el respeto hacia los demás, por sus valores y principios que lo hacen ser un profesional integral.
Se puede desempeñar como abogado litigante, como consultor empresarial, como funcionario judicial y como asesor empresarial en el sector privado nacional o internacional.
Por su formación disciplinar transversal puede también desempeñarse en la rama ejecutiva y legislativa como asesor legal.
Por su constante vocación hacia el aprendizaje y al nuevo conocimiento puede también desarrollar sus competencias profesionales en el ámbito académico.
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